martes, 25 de octubre de 2016

Procesos Biológicos -CONOCIENDO MÁS SOBRE LOS VIRUS



¿QUÉ SON LOS VIRUS?

¿Sabías que los virus son responsables de muchas enfermedades que conoces? Los catarros, la gripe, la varicela, ¡hasta las verrugas! son una pequeña parte de una larga lista de enfermedades producidas por virus.

Sabemos que los seres vivos están formados por células. Las células son los elementos más pequeños que tienen vida, es decir, se alimentan, respiran, eliminan las sustancias que no necesitan, se relacionan con el medio que las rodea y se reproducen.

Los virus son unos organismos un poco especiales. No son seres vivos porque no son capaces de realizar la mayoría de estas funciones. Sin embargo, sí son capaces de reproducirse y para ello, necesitan invadir las células de los seres vivos.
Los virus pueden invadir un ser vivo y multiplicarse dentro de él, es decir pueden infectarlo. Cada virus infecta solo a un tipo determinado de células.

¿CÓMO SON LOS VIRUS?

Los virus son muy pequeños. Tan pequeños, que solo desde que en el siglo pasado se consiguieron fabricar microscopios muy avanzados hemos sido capaces de verlos. Existen miles de tipos distintos de virus. ¡Piensa que hay unas 100 clases de virus que producen catarros!

Los virus son muy sencillos. Están formados por dos estructuras. Tienen una cubierta exterior que los rodea que se llama cápsida o cápside. La cápsida es una especie de cápsula que está formada por proteínas. Además, encerrado en el interior de la cápsida hay un material con forma de filamento. Este material recibe el nombre de material genético y contiene las instrucciones necesarias para fabricar nuevos virus iguales.

Los virus tienen formas muy diversas. Por ejemplo, algunos son esféricos, otros pueden recordar por ejemplo a un dado y otros, como los que infectan las bacterias, recuerdan a un pequeño cohete con una cabeza y una cola.

¿QUÉ HACEN LOS VIRUS?

Los virus producen enfermedades que afectan a las personas, a los animales, a las plantas y a las bacterias. Algunas son leves, mientras que otras pueden poner en peligro la vida. Seguro que has oído hablar de la gripe, la varicela, el sarampión, la rabia, la hepatitis o el SIDA. La lista de enfermedades producidas por los virus en el ser humano es muy larga.

LA LUCHA CONTRA LOS VIRUS

Cuando un virus entra en tu organismo, tu cuerpo intenta detener la infección. Envía células especiales que atacan a los virus para destruirlos. Estas células forman parte del sistema de defensas del cuerpo, de tu sistema inmunitario. En muchas ocasiones, tu cuerpo logra vencer al virus y los síntomas de la enfermedad desaparecen.

Tenemos muy pocos medicamentos que destruyan los virus. Aunque algunas medicinas ayudan a controlar la enfermedad, la gran mayoría solo se utiliza para que los síntomas, como el dolor de cabeza o la fiebre, sean menos molestos. Los científicos están investigando para obtener fármacos eficaces que luchen contra los virus. Los antibióticos no sirven para curar las enfermedades producidas por los virus, ya que destruyen otro tipo de gérmenes, las bacterias.


Para evitar las infecciones de los virus se han descubierto las vacunas. Las vacunas están formadas por virus muertos o debilitados. Nuestro cuerpo lucha contra estos virus más débiles y fabrica defensas. Si algún día este virus nos invade, nuestro cuerpo ya está preparado para defenderse. Nuestro cuerpo destruye el virus sin que nos pongamos enfermos.

ORGANISMOS AL LÍMITE DE LA VIDA

Los virus infectan todos los tipos de organismos, desde animales y plantas hasta bacterias y arqueas. Los virus son demasiado pequeños para poder ser observados con la ayuda de un microscopio óptico, por lo que se dice que son submicroscópicos.



Existen opiniones dispares sobre si los virus son una forma de vida o estructuras orgánicas que interactúan con los seres vivos. Por ello algunos autores se refieren a ellos como «organismos al límite de la vida». Por una parte se asemejan a los organismos que tienen genes y evolucionan por selección natural, y se reproducen creando múltiples copias de sí mismos para autoensamblarse. Sin embargo, carecen de estructura celular, lo cual es considerado la unidad básica de la vida. Además, los virus no tienen un metabolismo propio, y necesitan una célula hospedadora para crear nuevos productos. Por tanto, no se pueden reproducir en el exterior de una célula huésped (aunque bacterias como Rickettsia y Chlamydia son considerados organismos vivos a pesar de tener la misma limitación). Las formas de vida aceptadas utilizan la división celular para reproducirse, mientras que los virus aparecen de forma súbita y en gran cantidad dentro de las células, lo que es análogo al crecimiento autónomo de los cristales. El autoensamblaje de los virus dentro de las células tiene implicaciones para el estudio del origen de la vida, pues refuerza las hipótesis de que la vida podría haber comenzado en forma de moléculas orgánicas autoensamblantes.

La estructura vírica esta constituida por:

-Un genoma vírico en forma de ADN o ARN.
-Una cápside o cápsula proteica.
-En el caso de los bacteriófagos unas estructuras que sirven para anclarse denominadas patas y una estructura cilíndrica retráctil que sirve para inyectar el virus dentro de la célula.

viernes, 7 de octubre de 2016

LOS VIRUS Antecedentes históricos I PARTE



En biología, un virus (del latínvirus, «toxina» o «veneno») es una entidadinfecciosamicroscópica que sólo puede multiplicarse dentro de las células de otros organismos. El primer virus conocido, el virus del mosaico del tabaco, fue descubierto por Martinus Beijerinck en 1899, y actualmente se han descrito más de 5.000, si bien algunos autores opinan que podrían existir millones de tipos diferentes. Los virus se hallan en casi todos los ecosistemas de la Tierra y son el tipo de entidad biológica más abundante. El estudio de los virus recibe el nombre de virología, una rama de la microbiología.

La palabra proviene del latínvirus, que hace referencia al veneno o alguna sustancia nociva, y fue usada por primera vez en inglés en 1392.[]Virulento, del latín virulentus (venenoso), data del 1400.La mención de «agente que causa enfermedades infecciosa» se usó por primera vez en 1728, antes del descubrimiento de los virus por Dmitri Ivanovski en 1892. El adjetivo "viral" data de 1948.[] El término «virión» también se utiliza para referirse a una única partícula vírica infecciosa. El plural es «virus».

A mediados del siglo XIX, Louis Pasteur propuso la teoría germinal de las enfermedades, en la cual explicaba que todas las enfermedades eran causadas y propagadas  por algún «tipo de vida diminuta» que se multiplicaba en el organismo enfermo, pasaba de éste a otro y lo hacía enfermar. Pasteur, sin embargo, se encontraba trabajando con la hidrofobia, y descubrió que aunque la enfermedad fuera contagiosa y ésta se contrayera por el mordisco de un animal rabioso, no se veía el germen por ningún lado. Pasteur concluyó que el germen sí se encontraba ahí, pero era demasiado pequeño como para poder observarse.


En 1884, el microbiólogo francés Charles Chamberland inventó un filtro (conocido actualmente como filtro Chamberland o filtro Chamberland-Pasteur) que tiene poros de tamaño inferior a los de una bacteria. Así pues, podía hacer pasar por el filtro una solución con bacterias y eliminarlas completamente de la misma. El biólogo ruso Dmitri Ivanovski utilizó este filtro para estudiar lo que actualmente se conoce como virus del mosaico del tabaco. Sus experimentos demostraron que los extractos de hojas molidas de plantas infectadas de tabaco seguían siendo infecciosos después de filtrarlos. Ivanovski sugirió que la infección podría ser causada por una toxina producida por las bacterias, pero no continuó apoyando esta idea. En aquella época se pensaba que todos los agentes infecciosos podían ser retenidos por filtros y, además, que podían ser cultivados en un medio con nutrientes —esta opinión formaba parte de la teoría germinal de las enfermedades

En 1899, el microbiólogo neerlandés Martinus Beijerinck repitió los experimentos de Ivanovski y quedó convencido de que se trataba de una nueva forma de agente infeccioso.[] Observó que el agente sólo se multiplicaba dentro de células vivas en división, pero como sus experimentos no mostraban que estuviera compuesto de partículas, lo llamó contagium vivum fluidum («germen viviente soluble») y reintrodujo el término «virus». Beijerinck mantenía que los virus eran de naturaleza líquida, una teoría más tarde descartada por Wendell Stanley, que demostró que eran particulados.[] En ese mismo año, en 1899, Friedrich Loeffler y Frosch pasaron el agente de la fiebre aftosa —el aftovirus— por un filtro similar y descartaron la posibilidad de que se tratara de una toxina debido a la baja concentración, y llegaron a la conclusión de que el agente se podía replicar.